11 marzo, 2011

Si, ya sé, ya sé lo que me vas a decir. Que son casualidades, que estas cosas pasan. Sos un racionalista, y, por eso, tenés razón. Pero fijate. Fue poner un pie en la vereda y notar ese micro parado, casi en el medio de la calle, con todo su pasaje alrededor. Cuando pasé al lado, ví que tenía las puertas abiertas de par en par y que había un tipo tirado en el suelo, con una mina encima haciéndole reanimación. Yo seguí, hasta la parada. Desde ahí veía el transito esquivar al micro detenido para llegar hasta donde estaba yo. Llegaron varios bondis. El mío no. En cambio, pasaron un par de camiones cargados de manifestantes, golpeando sus bombos y cantando sus consignas. Mi micro no llegaba. A mis espaldas sonó una frenada y el seco paff de dos vehículos que chocan. Me dí vuelta para mirar. Un móvil de control urbano estaba en el medio de la bocacalle, con el paragolpes caido en el suelo. Unos metros más allá, un auto con el guardabarros trasero deshecho. Uno de los dos pasó en rojo. Bocinas. Mi micro no llega. Se oyen unas sirenas acercarse, no alcanzo a ver. Pasan más camiones cargados con manifestantes. Pasan más micros. El mío no. Una ambulancia pasa lentamente junto a mí, vacía. Una pareja llega a la parada. "No había nada que hacer", escucho. "Le dió un paro". Decido ir a tomar el subte. Desando lo andado y vuelvo a pasar al lado del micro detenido. El tipo sigue tirado ahí. Ahora lo cubre una manta y unos policías a su alrededor hacen lo que sea que hagan los policías en estas circunstancias. Ya sé lo que me vas a decir: accidentes hay todos los días. Pero, viste, hoy se murió Viñas y un terremoto hizo mierda Japón. Si, claro: los humanos nos morimos a carradas todos los días. Sos un racionalista y, la verdad, tenés razón: convivimos con eso. Hoy yo lo percibí.

Sentí lo ominoso flotando en el aire.

3 comentarios:

Pablo Seguí dijo...

Disculpá, pero no me convence cuando pasa de pasado a presente. Hay algo que no se termina de lograr ahí. Puede que la entrada no fuera primordialmente de intenciones literarias, pero me sentí algo incómodo.

Pablo dijo...

Pucha, puede que tengas razón. Siempre hay "intenciones literarias". Fue un texto bastante crudo, posteado casi sin corregir. Me dejaste maroteando...

Pablo Seguí dijo...

Ojo que es cómo lo fui percibiendo yo, Pablo. Quizá sea prurito mío. Abrazo.